DESCRIPCIÓN DE LA OBRA

Mi obra muestra seres “vivos” exuberantes y exaltados en una actitud de movimiento casi amenazante; sin embargo estos seres están fijados a la superficie por tornillos y rodajas de metal que contradicen esta idea de movimiento y se contraponen por su dureza y crueldad a la noble y graciosa flexibilidad del papel pintado y recortado. La contradicción entre las calidades y origen de los materiales y del movimiento contra lo anclado mediante productos emblemáticos de la industria, representa la actividad depredadora del hombre y de la sociedad de consumo contra los recursos naturales y el medio ambiente.

El papel tiene origen vegetal: celulosa y corteza son vida sacrificada y procesada; el tornillo es el soporte de múltiples estructuras de la civilización post industrial; el acero que uso como un recurso dibujístico que crea una sombra sobre la estructura, es un voraz consumidor de combustibles fósiles durante su proceso de forja, por lo tanto generador de un alto impacto sobre el deterioro de las condiciones climáticas; el acrílico proviene del proceso industrial del plástico; las langostas, al igual que los peces y otras formas de vida, son animales que rondan el lecho marino, depósito de escombros y de partículas contaminantes, por lo tanto son víctimas de nuestras erráticas acciones.

Humildemente reconozco influencias y aportes de diferentes fuentes y autores que fluyen sobre mi obra: el colorido y la explosión de formas de Obregón, la escultura de Calder, la búsqueda de significados y posibilidades expresivas del uso de materiales diversos y poco convencionales hecha por Eduard Moreno. Por otra parte, aparece en la creación, mi experiencia pedagógica con niños de diferentes edades que implica manejo de materiales escolares y ejercicios de recorte, plegados, rasgado y pegado de papel; y hasta el trabajo como armador de galeras de periódico con procesos manuales y la humilde labor de los artesanos que elaboran figurillas con pinzas y alambre. Apropósito del “delineado” con alambre existe una similitud y una referencia directa con las formas de mis obras y las líneas de Nazca.

Mi obra refleja muchas experiencias personales. Desde lo laboral, una búsqueda de autenticidad; y desde lo estético, una inquietud profunda por la problemática social y ambiental que nos afecta a todos. Mi obra es concebida como una búsqueda constante de contacto con diversos referentes de la historia del arte, y la profunda convicción de que el arte puede aportar mucho a la construcción de una conciencia y memoria colectivas que nos permitan alcanzar una convivencia más razonable y amable entre nosotros y con nuestro entorno.

Orlando Ramírez Avendaño